Es posible añadirle productos para darle al pavimento un toque artístico con distintos colores. Por supuesto, las técnicas empleadas no dañan el suelo (no lo rayan, no lo desgastan). También la elección del brillo deseado.
Rehabilitar un antiguo pavimento a uno totalmente nuevo y estético con hormigón pulido será una inversión a largo plazo. Además, es un material que ofrece muchas mejores prestaciones que otros (facilidad de limpieza, mantenimiento), lo cual reduce muchos costes de reparación, por ejemplo.
La superficie, al ser lisa y pulida, no absorbe residuos, no acumula suciedad ni polvo. Entonces, se elimina la posibilidad de aparición de bacterias, alérgenos, etc.
A factores mecánicos (choques, impactos), a factores químicos (productos de determinadas industrias) o factores climatológicos (lluvia, calor, nieve, etc.). Además, aguanta el tráfico de vehículos pesados, maquinaria …
- Fácil de limpiar y mantener en buen estado
Al no tener juntas abiertas y no haber huecos dónde pueda “esconderse” la suciedad, es muy fácil de limpiar
En definitiva, tenemos un pavimento con posibilidad de personalizarlo, que genera un entorno de trabajo seguro e higiénico, resistente a agentes externos, fácil de limpiar, resistente, estético, duradero y antipolvo.