El granallado de hormigón constituye uno de los sistemas de mayor popularidad para tratar superficies de este material y consiste en proyectar a gran presión granalla (granos pequeños de dimensiones comprendidas entre los 0,1 y 8mm) para “arrancar” la capa superficial (llamada capa de rodadura) del pavimento fraguado.
Sin embargo, el granallado no solo se realiza sobre este material. Vamos a averiguar un poco más sobre esta técnica.
¿Qué es el granallado?
Consiste en aplicar sobre una superficie a alta presión un fluido (ya sea de agua o aire), al que se le añaden partículas metálicas, de arena u otros materiales, para lograr un efecto abrasivo.
Este tratamiento puede realizarse con distintos fines, en función de lo que queramos conseguir.
Asimismo, se puede aplicar de distintas formas, las cuales obedecen al resultado que busquemos y el material a tratar.
De este modo encontramos, por ejemplo, el granallado húmedo abrasivo, el cual usa partículas de metal y plástico a través de una corriente de agua caliente con jabón.
También tenemos el granallado de vidrio, que evita producir daños sobre superficies de cristal, o el granallado de rueda, que emplea la fuerza centrífuga para “empujar” el medio abrasivo.
El granallado permite la limpieza de la superficie sin dañarla. Por ello, cualquier material adherido que tenga, aunque sea una suciedad que lleva pegada durante años, puede quitarla.
Así, devolvemos el color, encanto y atractivo que la superficie había perdido por años de continuo uso.
Además, el granallado contribuye a aumentar el agarre del pavimento y evitar la acumulación de agua en la superficie.
«Es un acabado muy versátil y que se puede aplicar sobre distintos tipos de material, como el hormigón o la piedra.»
En este artículo vamos a centrarnos en el granallado de hormigón.
¿Qué es el granallado de hormigón?
Es una solución avanzada y moderna que permite preparar y sanear un pavimento antes de la aplicación de un revestimiento.
Lo que hace es desbastar la capa de rodadura del hormigón, proporcionándole una rugosidad perfecta para aplicarle un revestimiento, como resinas epoxi o microcemento, o para un tratamiento de alisado de hormigón pulido, facilitando su adherencia.
Es un método que recicla el material abrasivo al recogerlo en un recipiente hermético, evitando así la contaminación.
Estudio previo al granallado de hormigón
Para que el granallado de hormigón tenga resultados satisfactorios, es preciso destacar que cada caso tiene sus propias particularidades.
Por ejemplo, no es lo mismo efectuarlo sobre una autovía que sobre una glorieta. Debe analizarse las características del pavimento, la humedad del ambiente, el tipo de granalla, la granulometría, la capacidad del aspirador y la máquina, el ancho de trabajo, la velocidad, etc.
En definitiva, son factores que influyen directamente en la elección del tipo de granallado y la estrategia para abordar el proceso.
«Hay casos en los que, para conseguir mejores resultados, es mejor limpiar la superficie antes de granallar.»
¿Qué son las granalladoras de hormigón?
Son equipos que, a través de la granalla, es decir, bolitas de acero u otros materiales de aproximadamente 2 mm de diámetro, golpean el pavimento de hormigón a gran presión y velocidad con el objetivo de eliminar la capa superficial (antiguos recubrimientos, manchas, etc.) y dejarle en las condiciones óptimas para la aplicación de un nuevo revestimiento.
Sin embargo, es importante destacar que se pueden utilizar sobre distintos tipos de suelos, como el asfalto, el hormigón e incluso el acero.
Muchas granalladoras de hormigón expulsan las bolitas sobre la superficie a gran velocidad, fracturándola junto con la suciedad, pintura u otro residuo contaminante.
La capacidad de eliminación de la suciedad depende de varios factores como la velocidad de desplazamiento de la máquina, la fuerza del impacto de la granalla, el tamaño y concentración de esta, entre otros.
«¡¡¡CONSEJO!!!: Si la máquina se mueve LENTAMENTE por el pavimento de hormigón, se eliminan más residuos y los resultados son mejores.»
Un gran beneficio de estas máquinas es que generan poco polvo o desechos en el ambiente, porque cuentan con un colector que los recoge, por lo que son una excelente alternativa en industrias agroalimentarias o centros logísticos.
Usos de las granalladoras de hormigón
Estos son algunos de los usos que ofrecen:
- Renovar carreteras (incrementando la seguridad).
- Quitar marcas de pintura en suelos industriales, pistas de aeropuertos, autopistas, etc.
- Retirar antiguos revestimientos.
- Preparar y limpiar pavimentos antes de aplicar pinturas o revestimientos.
¿Cómo funciona una granalladora de hormigón?
En el mercado hay una amplia variedad de máquinas granalladoras de hormigón con distintas capacidades de trabajo, por lo que es tu trabajo decidir cuál es la que mejor se puede adaptar a tu situación.
Por norma general, todas funcionan de la misma forma, cómo esta que os dejamos en este vídeo.
A través de una turbina, la granalla se arroja en la superficie a tratar y, después, se recoge por aspiración. Los residuos creados por el propio tratamiento y la granalla son aspirados y llevados a un separador instalado en el interior de la maquinaria, que se encarga de segregarlos por diferencia de peso: la granalla limpia cae de nuevo al contenedor para volver a ser usada hasta que se desgaste del todo y los residuos van directamente al sistema de aspiración.
Aquí os dejamos un vídeo sobre varios tipos de granalladoras y el resultado que dejan.
Hasta 1930, el granallado se efectuaba con boquillas de aire comprimido. Es un sistema que, por ejemplo, es único para determinados trabajos, como la conservación de estructuras de hormigón armado.
Con el paso del tiempo y los avances tecnológicos, se posibilitó hacer el granallado en líneas de producción gracias a la aparición de turbinas centrífugas, el cual es mucho más eficiente que el de aire comprimido, además de conseguir una mayor uniformidad para preparar la superficie.
Ventajas del granallado de hormigón
Algunas de las ventajas y características propias del granallado de hormigón son las siguientes.
No afecta química ni estructuralmente la superficie
El proceso de granallado de hormigón no aporta o añade ningún material al pavimento, ni lo altera.
No influye en el ritmo normal de actividad
Realizar un granallado no implica detener por completo la actividad que se realice sobre ese pavimento. Se puede realizar por zonas y organizarlo de tal modo que afecte mínimamente.
Facilidad de aplicación
Sólo se necesita a la granalladora de hormigón para realizar este proceso. No se requieren de maquinarias auxiliares.
No afecta a la planimetría de la superficie
El espesor de la capa superficial del pavimento no se varía.
Respetuoso con el medio ambiente
Los residuos generados son aspirados, impidiendo la producción de polvo. Es más, la granalla recogida se puede reutilizar. El aspirador no emite a la atmósfera ninguno de los residuos retirados con el granallado.
Rápida apertura a la actividad
No se necesitan que pasen días para trabajar sobre esa zona. La vuelta a la normalidad es inmediata.
Perfecto para actuaciones muy localizadas
Por su precio y rapidez, es una alternativa muy rentable para zonas de superficie reducida.
Tratamiento rápido
Además de la propia rapidez del procedimiento, los tiempos de preparación son ínfimos, así como las labores de terminación.
No se necesita repintar señalizaciones
Si movemos lentamente la maquinaria como hemos recomendado antes, se pueden evitar las marcas viales.
Conclusiones
Como hemos podido comprobar, el granallado tiene varias funciones.
Permite limpiar superficies con manchas de mucho tiempo y difíciles de quitar y, asimismo, posibilita retirar capas superficiales de antiguos recubrimientos para instalar unos nuevos.
También hemos visto como es un proceso aplicable a distintos tipos de materiales, desde piedra, vidrio u hormigón, sobre el cual hemos centrado este artículo.
Para ello, se emplean unas máquinas conocidas como granalladoras de hormigón, que emiten a alta presión unas grallas de aproximadamente 2 mm y realizan ese efecto de abrasión que permite quitar.
Se trata de un procedimiento que, por su coste, versatilidad y facilidad, está muy implementado en empresas que se dedican a la renovación de pavimentos.
Referencias
Estas son algunas de las webs a las que hemos acudido para la redacción de este artículo:
- elrincondepitagoras.es
- cym.com.ar
- prefabricadosjara.com
- maquinter.es
- heringinternational.com
- pulimentosmolina.es